Don Santiago Rodríguez Domínguez, El Buen Pastor se La Parroquia del Carrizal (1965-1970)
Artículo de Antonio Estupiñán Sánchez
24 de Agosto de 2016
Por aquellos difíciles años de la Posguerra (década de 1960), lo fue también para nuestra parroquia de Ntra, Sra. Del Buen Suceso. Muchos de los sacerdotes que pasaron por esta parroquia, quizás el que nos trajo aires de cambio y transformación espiritual, social y humana fue el que fuera apreciado y querido sacerdote don Santiago Rodríguez Domínguez, cuando se hizo cargo de esta parroquia del Carrizal en Enero de 1965, nadie se podía imaginar que este joven pastor de 34 años de edad, natural del pintoresco barrio de Los Arbejales en Teror, después de ser ordenado sacerdote en 1958, ocupó durante siete años la parroquia de Ntra. Sra. De los Dolores en Schaman, hasta su posterior traslado a la parroquia del Carrizal (1965). En sus primeros meses en su nuevo destino comenzó por cambiar viejas costumbres eclesiástica hacia el nuevo camino del modernismo, donde iba a tener de cara al futuro los principios fundamentales de las autonomías religiosas para con sus relaciones entre la parroquia – fieles y el pueblo. En 1965 en las fiestas de la Virgen (Agosto), la procesión dio la vuelta al pueblo en acción de gracias por la feligresía.
Don Santiago comenzó a trabajar de forma incansable en diversas reformas en el templo parroquial (arreglo de fisuras en su estructura) gracias a las ayudas económicas de sus feligreses, asimismo sus visitas pastorales a los humildes hogares  y enfermos contribuyó a recibir múltiples satisfacciones del pueblo, organizó la “Comisión Parroquial” y la de “Adoradores Nocturnos”, periódicamente se desplazaba  a decir Misas en beneficio de los mayores a los barrios de Las Puntillas y Las Majoreras y en su pensamiento estaba por construir una ermita en la zona de Los Arenales (hoy Barrio Nuevo), para atender las demandas de los feligreses mas lejanos.
Don Santiago fue un entusiasta amigo del deporte del balompié , organizó a los pequeños del pueblo en numerosos equipos y campeonatos, de ahí salieron figuras estelares al Unión Carrizal como Pepe Nicolás, Leonardo Martín, Emilio Peret,  los hermanos Pepe y Nono Sosa y otros. Aparte de atender el culto, don Santiago con ayudas, rifas y donativos que aportaron los trabajadores-as de los almacenes del empaquetado del tomate, rehabilitaron el entonces ruinoso y viejo cine (frente a la Iglesia) en un flamante Salón Parroquial de dos plantas para las numerosas actividades culturales, teatrales, musicales, conferencias y secciones de cine, en iguales circunstancia lo hizo con el cementerio parroquial que ofrecía un estado deplorable, don “Santiago el Cura” como cariñosamente le llamaban, gracias a los donativos del pueblo del Carrizal, el cementerio se rehabilitó y pusieron los primeros nichos.
Don Santiago Rodríguez Domínguez, en tan sólo cinco años de su estancia en la Parroquia del Carrizal,  logró una envidiable transformación socio – religiosa así como de haber contribuido, gracias a los donativos del pueblo de varias necesidades de ocio y también de un banco de alimentos para los más necesitados, aparte de dar una nueva visión futurista en el umbral de la decadencia del franquismo. Hoy se le recuerda con una calle a su nombre (junto a la Sociedad Cultural Deportiva del Carrizal), su última actuación socio religiosa lo hizo este año de 2016 al servir de "Pregonero en las Fiestas Mayores de la Patrona del Carrizal Ntra. Sra. del Buen Suceso"