10 Años del Enterramiento de Plantas en El Barranco de Los Aromeros
Artículo de Antonio Estupiñán Sánchez
15 de Noviembre de 2016
Se cumple 10 años (2006 / 2016) del enterramiento de cientos de plantas (por no decir miles) en la zona cercana al Puente de Los Aromeros (Circunvalación Carrizal / Ingenio), donde sepultaron en las laderas de dicho barranco un buen trozo de terreno / ladera arrastrando consigo mismo parte de nuestra flora nativa y también de la fauna silvestre, aquello constituyó un atentado al Medio Ambiente, hecho por la "mano del hombre" como principal responsable, esto nos hace recordar al célebre Wiston Churchil cuando dijo aquello de..."La Política y los Políticos, hacen y deshacen lo que les convienen..".
En el municipio de la Villa de Ingenio, la normativa vigente de Medio Ambiente tuvo mucho que desear en relación con aquel vertido, les damos toda la razón mundo cuando usan los medios informativos en general advirtiendo a los vecinos de los vertidos en las calles de enseres, basuras, escombros incluido en los barrancos y otros lugares, con sanciones a quienes los originan , pero cuando los vertidos es en forma de “echar toneladas de tierra y piedras” sepultando plantas vivas de nuestra flora nativa conjuntamente con la fauna silvestre, el organismo responsable de Medio Ambiente en el Ayuntamiento de Ingenio…?Porqué no intervino¿...(¡).
En aquellas fechas cuando los trabajos estuvo en su fase terminal en la circunvalación Carrizal-Ingenio que hoy la atraviesa un puente a través del Barranco de Los Aromeros, se vio obligado en su día hacer una carretera secundaria hacia el fondo de dicho barranco hasta los bajos del citado puente para transportar materiales para la construcción del mismo, siendo más tarde  aprovechada aquella imprevista carretera para la descarga de toneladas y toneladas de tierra y piedras desde lo alto de la ladera de dicho barranco hacia el fondo del mismo, sepultando consigo mismo a cientos de plantas de nuestra flora nativa tales como Aulaga (launaca arborescens), Bálos (Plocama Pendula), Tabaíbas Dulces (Euphorbia Balsamifera), Tabaiba Amarga (E. Regisjubae), Veroles (Klenia Nerufolia), Tuneras Indias (O. Dilenii), y algunas Palmeras Canarias (Phoenix Canariensis), aparte de las clásicas plantas endémicas del lugar. Como hecho curioso una palmera canaria quedó casi sepultada, su fortaleza por sobrevivir a diez años vistas logró salir y  tiene ya varios metros de altura (siendo la única planta superviviente de aquella tragedia). También la Fauna Silvestre sufrió las terribles consecuencias ya que esta zona anidan los llamados "pájaros moros" y capirotes, la abubilla, tórtola, conejos, el salta monte común, el erizo moruno y el lagarto gigante de Gran Canaria y otros.
El Barranco de Los Aromeros nace en las medianías de Ingenio y desemboca en la misma Playa del Burrero, en sus seis kilómetros de longitud  es poseedora de una rica arboleda tradicional, autóctona y endémica, el cuál es un atractivo para el visitante, especialmente los turistas que nos honra con su visita. La apertura de dicha circunvalación Carrizal-Ingenio inaugurada por el entonces alcalde Domingo González Romero con el bipartito Agrupa Sureste / Partido Popular constituyó  un gran acontecimiento vial, donde hoy circulan millares de vehículos y guaguas turísticas diariamente por ella, quedando "oculta" para nuestro infortunio ésa fea visión Medio Ambiental, que a pesar de los años sigue latente ahí de lo que fue incalificable hecho destructivo que hoy en la actualidad se puede apreciar antes de llegar al citado "Puente de Los Aromeros". Sobre este tema existe un hecho curioso y es que en "diez años" por donde vertieron la tierra no...!!crece ni la hierba¡¡...?habrá pasado el espíritu del legendario guerrero Atila¿...(¡).
En su día se hizo eco de la noticia el grupo ecológico "Los Verdes del Sureste" que llegó a las puertas de la U.E., mientras los grupos políticos en el Ayuntamiento de Ingenio incluidos los colectivos y asociaciones vecinales y ciudadanos del municipio no se pronunciaron ni denunciaron tal atrocidad...(¡).