Dentro del mundo de la botánica, la famosa planta del Berro está siempre presente en nuestra salud, en nuestros caldos / potajes y en las ensaladas durante todos los días del año (especialmente en otoño e invierno). Esta conocida planta, bien sea de origen silvestre como cultivadas poseen innumerables propiedades. El berro es una planta perenne (Nasturtien Oficciale) y es de la familia de las crucíferas cuyo parentesco es también las coles, los rábanos y el brócoli, dicha planta es de rápido crecimiento y su cultivo precisa esmerados cuidados higiénicos sanitarios en las calidades de sus aguas de regadíos incluidos los de origen silvestres (los que nacen en zonas húmedas y corrientes de aguas externas), no debiéndose consumirse de estar plantadas en zonas estancadas por sus posibles transmisiones infecciosas. También ésta planta está contraindicada a las embarazadas, puede provocarles el aborto. Asimismo el berro no es aconsejable degustarlo en “plena floración” puede resultar indigesta.

Dentro de las múltiples virtudes sumamente saludables del berro está en su poder depurativo, diurético, estimulante, febrífugo, digestivo, descongestionante, laxante y antirreumático, es rico en vitaminas A y C, calcio, hierro, manganeso, caroteno, ácido fólico y proteínas, se dice que su alto contenido antioxidante les da potencia como “hierba anticancerígena”, dentro de sus propiedades en épocas otoñales e invernales resultan un eficaz remedio para la tos y la bronquitis, dícese  que el berro es un activo componente en combatir las infecciones y las secuelas del tratamiento con antibióticos, beneficiando al colon y otras partes del cuerpo humano. Como todas las plantas del fabuloso mundo de la botánica el berro tiene múltiples acciones beneficiosas para nuestra salud y recordar siempre para la tranquilidad de sus padecimientos y tratamientos (si los tuviera) en hacérselos llegar a su médico, antes de su consumición de esta excelente planta que nos ha dado la naturaleza.

En el rico mundo de nuestra gastronomía, el berro es muy apreciado en nuestros exquisitos caldos y potajes y ensaladas. Para los habitantes de muchos hogares de las islas canarias, el clásico “potaje de berros” preparados de diversas formas, especialmente los potajes de berros servidos en familia, son degustados tanto en su natural forma tradicional como acompañado de las suculentas y sabrosas costillas  carnosas y si les agregamos nuestro rico cereal (léase gofio de millo), sus exquisitos sabores invita a su “repetición”. En muchos restaurantes de Canarias el potaje de berros lo tienen como “plato estrella”. También en las ensaladas la incorporación del berro les da un toque especial (algo picante) que, culinariamente, les distingue de las demás ensaladas. Existen cientos de recetas gastronómicas del suculento berro, hemos expuesto aquí algunas de las “tradicionales” que degustamos en Canarias.

Tenemos por lo tanto en el berro a un potente amigo nutricional, saludable para nuestras defensas con la observación de que para muchos enfermos precisa la consulta de su médico antes de su consumición.